El agua y nuestra piel

El agua y nuestra piel

Mantenerse hidratado es fundamental por muchas razones.

No solo es importante para recuperar todos esos líquidos que hemos ido perdiendo a lo largo del día a través de la respiración, la transpiración, la orina y las deposiciones. También debemos consumir bebidas y alimentos que contengan agua si queremos que nuestro organismo funcione correctamente.

En el caso de la piel, esta mantiene su humedad gracias al agua procedente de las capas más profundas y a la secreción normal del sudor. Para que la piel mantenga su elasticidad y conserve su función de barrera protectora necesita el agua como componente esencial. El contenido de agua de la capa córnea superior se encuentra entre el 10 y el 20% del contenido total de agua del organismo. Por debajo del 10%, la piel se seca, se vuelve más frágil, áspera, apagada y más expuesta a enfermedades cutáneas, además de hacer más visibles las arrugas.

El agua rejuvenece la piel, la desintoxica y lucha contra el envejecimiento cutáneo, contribuyendo a la ralentización de los signos de la edad.

Aquí algunos beneficios de beber agua en la piel:

  • Protege la piel de la deshidratación. Mantener una correcta hidratación, hace que la piel no se seque y mantenga su elasticidad y fortaleza.
  • Mejora visiblemente la piel, ya que la hidratación del cuerpo se traduce en una piel más luminosa y suave. Esto también se consigue en otros tejidos, como el cabello.
  • Ayuda a eliminar toxinas que pueden ocasionar trastornos en el cutis como piel opaca o acné.
  • Disminuye el riesgo de tener celulitis y várices. Así es, tener una adecuada hidratación mejora la circulación sanguínea, lo cual permite una correcta oxigenación de cada tejido.
  • Rejuvenece la piel. Al beber agua evitamos que la piel se seque y que sufra los daños provocados por distintos factores externos. La hidratación constante puede ayudar a mantener la piel más joven y saludable por más tiempo.
  • Aumenta la elasticidad de la piel, contribuyendo a aumentar la vida útil de la piel y a reducir las estrías. Una piel bien hidratada puede estirarse más sin sufrir daños.
  • Beber agua ayuda a reducir la hinchazón corporal, sobre todo de piernas y abdomen.

¿Cuántos vasos de agua se deben beber al día?

A diferencia de lo que mucha gente cree, no hay un número exacto sobre la cantidad de litros (o mililitros) que una persona deba consumir al día. Según los expertos, nuestro cuerpo es lo suficientemente inteligente como para saber cuándo nos hace falta hidratarnos y cuándo no. La respuesta es sencilla: escucha a tu cuerpo e hidrátate cada vez que te lo pida.

Recuerda también incluir en tu rutina diaria del cuidado de tu piel, un producto clave que ayude a retener la humedad de tu piel y el ácido hialurónico es el ideal.

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